lunes, 9 de marzo de 2015

Paneles Solares Fotovoltaicos

Paneles Solares Fotovoltaicos Precio 
El funcionamiento de los paneles solares 
Un panel solar fotovoltaico (también llamado panel solar o kit fotovoltaico) está formado por celdas solares que convierten la luz del sol en electricidad. Las celdas recogen la radiación solar y la transforman en corriente continua. Como la corriente continua no sirve para usar electrodomésticos se necesita un inversor o convertidor que es el encargado de transformar la corriente continua en corriente alterna que es la que necesitamos para utilizar los electrodomésticos. ¿Sabes dónde encontrar una panel solar barato? 
Los paneles solares deben recibir los rayos solares de forma directa, sin sombras, para así aprovechar al máximo la luz del sol. La mejor orientación para captar la mayor cantidad de horas de sol es orientación Sur. Si no es posible colocar los paneles exactamente con esa orientación, se ha de procurar que al menos sea la más aproximada posible, sureste o suroeste. 
Hay que distinguir entre las paneles solares fotovoltaicos y las placas solares térmicas. 
  • Las placas térmicas convierten los rayos del sol en calor y se utilizan sobre todo para calentar agua. 
  • Las placas fotovoltaicas ofrecen más posibilidades puesto que sirven para generar energía eléctrica necesaria para cualquier aparato. 
¿Qué tipos de paneles fotovoltaicos existen? 
ImagenHecha la distinción anterior, hay listar los diferentes tipos de paneles solares fotovoltaicos, los cuales se emplearán luego para montar tus propios kits fotovoltaicos, que podemos encontrar: 
  • Los paneles monocristalinos son los formados por un solo cristal, el silicio fundido se forma en un solo grano. El rendimiento energético es mayor que en la célula policristalina. Si vas a instalar un seguidor solar son los más adecuados. Este tipo de paneles dan mejor resultado en los climas fríos. 
  • Los paneles policristalinos son aquellos en los que se deja que el silicio fundido se forme aleatoriamente y por tanto, se obtienen granos distintos (con orientaciones distintas) con lo que necesariamente el rendimiento energético tiene que ser menor. Sin embargo, los paneles policristalinos son los más apropiados para climas cálidos como es el caso de nuestro país. 
Tamaños y potencias de los paneles solares fotovoltaicos 
ImagenExiste una gran variedad de tamaños y potencias de paneles solares. Debemos elegir aquel que se ajuste a nuestras necesidades En el mercado podemos encontrar potencias de de 10W; 15W; 25W; 45W; 90W; 140W y 195W. 
No es lo mismo los paneles que se necesitan para una vivienda unifamiliar que los que serán necesarios si se trata de una instalación comunitaria para todo un edificio, o incluso si es para toda una urbanización. En este caso, la potencia y el tamaño de los paneles fotovoltaicos (y el precio) serán necesariamente mayores. 
El precio de los paneles fotovoltaicos depende de diferentes factores, entre ellos la potencia o el tamaño. Una de las cuestiones que más condicionan el precio de los paneles fotovoltaicos es su uso final. Es decir, necesitaras más paneles para generar calor para la calefacción que si solo vas a utilizar los paneles conectar algunos electrodomésticos pequeños. También influye en el precio la estructura necesaria para su colocación, sobre todo si las placas se han de colocar en un edificio de reciente construcción o en una vivienda antigua. Cuanto más complicada sea la estructura necesaria para la colocación mayor será el precio de los paneles fotovoltaicos. 
Hablemos de Precio, ¿Cuánto puede costar un panel solar fotovoltaico?

Reciclar agua de lluvia para el consumo

Reciclar agua de lluvia para el consumo 
6 de agosto de 2014 | 17:42 pm · Ana Isan · Agua · Reciclaje · sequía · viviendas 
ImagenPara recolectar y reutilizar agua de lluvia a nivel doméstico no se necesitan sofisticados métodos de recolección. Aunque existen sistemas automáticos especiales para recolectarla a nivel comunitario, e incluso permiten para disponer de ella en toda la casa, cada vez que abrimos un grifo, su conveniencia dependerá de los patrones de lluvia de cada zona. En todo caso, será suficiente con poner un cubo en el balcón para que se llene cada vez que llueva o, aún mejor, instalar un barril conectado a los canalones.  
Conectar un barril al canal por el que se deriva el agua de las azoteas o techos para que no se inunden es un sistema muy popular. Podemos comprar el barril o hacerlo nosotros mismos, preparándolo convenientemente para recogerla y luego ofrecerla a través de un pequeño grifo al que, si lo deseamos, será fácil conectar la manguera.  
Barriles recolectores 
Bastará con tener un balcón, terraza, un jardín, privados o comunitarios, para instalarlos. En este segundo caso, habrá que pedir permiso previo a la comunidad e incluso proponer instalar varios para uso común en zonas verdes vecinales o para lavar los coches, etc.  
Imagen En nuestro hogar, usar el agua de lluvia tiene muchos más usos. Además de regar plantas o lavar el coche, podemos usarla para cualquier otra cosa (el inodoro, lavarnos el cabello, bañar a nuestra mascota, hacer la vajilla, la colada…), exceptuando su ingestión, simplemente por prevención, pues para beber el agua de lluvia deberíamos someterla a análisis y tratamientos previos para considerarla apta para el consumo.  
Si nuestra intención es ser autosuficientes, es decir, prescindir del agua potable, tengamos en cuenta que necesitamos tanques con capacidad mínima de 50.000 litros y, por supuesto, una climatología propicia. Por lo tanto, habremos de tener en cuenta tanto el espacio necesario para albergar esos tanques como los patrones de lluvia.  
En todo caso, al mismo tiempo que instalamos un sistema recolector, si la motivación es ahorrar agua, una buena opción es instalar accesorios y equipos que minimicen el gasto del agua potable en los grifos y en el sistema de distribución. Por último, no olvidemos mejorar nuestros hábitos de consumo a la hora de utilizar una y otra agua. 

Domótica en viviendas

Domótica en viviendas

DOMÓTICA, LA VIVIENDA INTELIGENTE
Estas casas se caracterizan, a nivel técnico, porque todas las instalaciones funcionan de forma integrada… O sea, que todo (persianas, luces, calefacción, aire acondicionado, alarmas, etc.) está interconectado, igual que en los coches desde hace años.
Casi sin darnos cuenta, de hecho, en nuestras viviendas convivimos, cada vez más, con instalaciones y automatismos que, poco a poco, vamos viendo como habituales:
* Ventanas y persianas eléctricas.
* Reguladores de intensidad de luz.
* Cronotermostatos digitales, para el control de la calefacción y/o el aire acondicionado.
* Toldos que se recogen de forma automática para prevenir roturas por el viento.
* Calefacciones que se encienden desde un SMS.
* Detectores de incendios o gases que cortan el suministro para evitar accidentes, y un largo etcétera.
Sin embargo, al contrario que en nuestros coches, estas instalaciones se han ido incorporando a nuestras viviendas como parches aislados, con las siguientes consecuencias más importantes:
* Instalaciones abarrotadas de cables, caras y difíciles de mantener.
* Pérdidas considerables de energía por de falta de integración que permite, por ejemplo, tener el aire acondicionado cuando las ventanas están abiertas o no hay gente en casa.
* Elementos aislados e independientes. Así por ejemplo podemos armar/desarmar la central de alarmas con un SMS pero, si queremos hacer lo mismo con la calefacción necesitaríamos tener otro dispositivo con una segunda tarjeta SIM (con el consiguiente coste) para hacerlo, ya que el comunicador GSM de la Centralita es sólo para la Central de alarmas.
* Controles duplicados, multiplicidad de telemandos, etc.
La domótica, es capaz de coger todos los dispositivos instalados en una vivienda y hacerlos funcionar “de forma integrada” para conseguir una vivienda cómoda, segura, y respetuosa con el medio ambiente… y con el bolsillo.
En resumen, la domótica es capaz de hacer funcionar de manera conjunta y optimizada todos los dispositivos que componen los cuatro pilares básicos que constituyen una vivienda actual:

EJEMPLO DE ALARMA DE INCENDIOS DOMÓTICA:
Detector de incendios: avisa a la instalación de la presencia de incendios
Central de alarmas: activa una sirena interior para avisar al usuario y avisa a una Central Receptora de Alarmas para que pueda llamar a los Bomberos
Pasarela GSM: manda un SMS al usuario avisando de la zona de la vivienda donde está el incendio.
Pantallas: Informan al usuario de la zona de la alarma.
Electroválvula de Gas: Corta automáticamente el suministro de gas a la vivienda para evitar posibles explosiones.
Cuadro eléctrico: Se corta el suministro de corriente a la vivienda para minimizar el riesgo de cortocircuitos dejando en funcionamiento sólo una iluminación de emergencia que facilite la evacuación.
Persianas/Ventanas eléctricas: Se cierran automáticamente para evitar avivar las llamas.

Mitos de la Domótica: No se deje engañar!!!
Mito 1: Estas casas tan complejas son sólo adecuadas para los aficionados a los ordenadores. Esto es absolutamente falso. De hecho una casa domótica es mucho más sencilla y segura que una convencional, siendo adecuadas para personas discapacitadas o de tercera edad, llegando a ser consideradas “viviendas asistidas” que simplifican y facilitan el uso, garantizando la seguridad incluso a pesar del error humano. Y todo esto sin un ordenador central ni tan siquiera una centralita domótica. Los distintos elementos se comunican entre sí para trabajar conjuntamente. Así, si un aparato se estropea, sólo se estropea la luz, la persiana o el elemento concreto que controle.
Mito 2: Para controlar estas viviendas hay que hacerlo siempre desde una pantalla táctil. Tampoco es cierto. Normalmente el control se realiza desde el mismo tipo de “interruptores” que se emplean tradicionalmente en todas las casas. Lo que sucede es que, por ejemplo, la misma luz que Vd. enciende desde un interruptor puede estar configurada para encenderse o apagarse en caso de una alarma, o apagarse cuando ha pasado un tiempo determinado desde que se abandonó la habitación, o desde el móvil. Sólo en los casos que el cliente lo desea se le puede poner una (o varias pantallas) para que controle toda su instalación y pueda utilizarla para diferentes funciones como, por ejemplo, video portero, visualización de cámaras IP o control de consumos energéticos.
Mito 3: Una casa con telemandos para las persianas es una vivienda domótica. Este mito explotado por muchos promotores durante la época del boom inmobiliario, sólo es cierto si dichas persianas por ejemplo realizan funciones como:
* Ahorro energético: procurando sol o sombra a la vivienda cuando sea necesario.
* Seguridad técnica: cerrándose en caso de incendio, o abriéndose en caso de escape de gas.
* Confort: cerrándose a la vez que se apagan las luces cuando el usuario se va a dormir y/o ayudando a conseguir escenas adecuadas que, de forma automática y en combinación con la iluminación, el televisor y el equipo de música, preparan el ambiente para leer o ver la televisión.
* Control: cerrándose cuando el usuario se va de casa y abriéndose si es de día cuando éste regrese.
* Simulación de presencia / Seguridad Anti-intrusión: subiéndose y bajándose para, en combinación con las luces, simular presencia cuando la vivienda está desocupada.
Mito 4: Estas viviendas son carísimas. Esto es uno de los mitos más extendidos y es absolutamente falso. Según el grado de domotización, se pueden realizar instalaciones en vivienda desde menos de 3.500 €. Además, estas instalaciones son “escalables”, lo que significa que se le pueden ir añadiendo funciones de acuerdo con las necesidades cambiantes del usuario, reformas, ampliaciones, etc. Y en cambio proporcionan ahorros energéticos de hasta el 70% en iluminación y el 50% en climatización.